Pino Sacripanti ha sido Campeón de Italia 3 veces dirigiendo equipos de base del Cantú. Fué Entrenador Ayudante de la Selección Italiana Junior antes de convertirse en Entrenador Jefe del Cantú, en la Serie A italiana. Sacripanti fue nombrado Entrenador del Año en 2002.
Es muy importante subrayar ciertas claves para impedir los tiros fáciles del contrario, reducir su porcentaje de acierto y rebote y aumentar el número de pérdidas de balón.
Puntos clave:
1. Comenzar con un ataque eficiente
2. Completar el contraataque
3. Uno contra uno sobre el balón
4. Uno contra uno sin balón
5. Diversos principios defensivos dependiendo del tipo de bloqueo
La defensa del equipo comienza con un ataque eficiente
- La principal meta de un ataque eficiente es conseguir buenos tiros
- Durante el desarrollo del contraataque, en todas las situaciones de sobrecarga, el último atacante se detendrá en el medio campo, preparado para guardar el balance defensivo si conseguimos finalizar el primer contraataque;
sólo en la segunda fase formará parte del segundo contraataque o de una posible transición ofensiva.
Completar el contraataque
Para desarrollar la mentalidad de la transición defensiva, es importante tener unas cuantas reglas básicas:
- Los dos hombres grandes van al rebote ofensivo, mientras que los tres exteriores guardan el balance defensivo; en caso de penetración de uno de los jugadores exteriores, el hombre grande que esté más alejado de la
canasta ayudará en el balance. - El hombre grande más cercano al reboteador del equipo contrario entorpece el pase de apertura y a continuación corre, tan rápido como pueda, a su área de defensa.
- El jugador exterior más cercano al driblador del equipo contrario, encargado de llevar el contraataque, debe encontrar la forma de ralentizar la subida del balón. Sus compañeros deben defender a los tiradores
y estar preparados para trabajar las posibles penetraciones, ayudando y recuperando.
Uno contra uno sobre el balón
El defensor del balón tiene una gran responsabilidad, y debe procurar no verse rebasado en situaciones de uno contra uno. Debe intentar evitar las ayudas defensivas, los cambios y las posibles rotaciones.
- Trata de contener al driblador, al menos durante los primeros tres o cuatro botes, dando tiempo a sus compañeros a situarse.
- Llevar el balón hacia las líneas laterales del campo siempre que sea posible, evitando las penetraciones por el centro, las cuales crean nuevos pasillos para el atacante.
- Sólo después de esto, intentamos evitar que el atacante utilice su mano más hábil. Si recibe el balón, el defensor debe denegar un bote fácil.
- Si el balón va al poste bajo, debemos intentar contener al atacante tanto como sea posible, haciéndole botar hacia el pasillo central. Cerraremos entonces ese camino, obligándole a ir hacia la línea de fondo,
donde contaremos con una ayuda desde el lado débil.
Uno contra uno sobre el jugador sin balón
- Sobremarcar agresivamente al jugador cercano al balón, bloqueando la línea de pase con el cuerpo o con la mano.
- Dejar al jugador más alejado del balón(lado débil), preparado para ver simultáneamente al balón y al jugador, para ayudar y comenzar la rotación desde la línea de fondo.
- Defender el poste bajo en tres cuartos, impidiendo que reciba de forma sencilla, rotando sobre él en relación a la posición del balón (Diagramas 1 y 2).
Diagrama 1
Diagrama 2